10.15.2014

Das sondaxes e as cicloxéneses

«Eso que llamamos sondeo bien podría ser una especie de ejercicio ilegal de la política consistente en pagar un microrreferéndum sin campaña sobre algo o sobre nada, con el objetivo de producir efectos políticos. Cabe pensar que si la prensa se muestra tan ansiosa de sondeos es porque también ellos buscan complacer al mayor número de gente para vender más.» 
(Champagne, P., citado en Comunicación Política de Gianpietro Mazzoleni)
En España segundo recolle o artigo 69.7 da Lei Orgánica 5/1985 do 19 de xuño, prohíbese a publicación e difusión de sondaxes por calquera dos medios dispoñibles, nos cinco días anteriores á unha votación, sexa esta, estatal, autonómica ou local. O motivo céntrase na capacidade da que dispoñen este tipo de cuestionarios para determinar a cor do voto, sobre todo o dos indecisos; pódese producir o que se denomina efecto bandwagon, que poderíamos cualificar como subirse ao carro, dos, que, neste contexto, serían os posibles gañadores.

Mais a pesares de xa estar acostumados ás informacións que tiran conclusións de variopintas sondaxes e enquisas, adaptando os resultados aos encadres ou frames de significado propios da manufactura de noticias, hai académicos que critican duramente estas prácticas, por consideralas pouco profesionais, como podemos ler, de novo no libro de Gianpietro Mazzoleni:
«Nando Pagnoncelli (2001, 88-100) indica algunas zonas críticas en la relación entre información y sondeo, entre las que destacan la limitada cultura de los periodistas en materia estadística  la excesiva distancia entre quien realiza las encuestas y quien las presenta con títulos y comentarios, con el posible riesgo de sujeción psicológica del investigador al periodista. A este propósito, escribe:
Tal vez se deba a que los periodistas manejan mejor la palabra y consiguen imponer su punto de vista, pero el caso es que la mayor parte de las veces el investigador, resignado, se retira y deja al cliente la parte del león. El periodista no se impone límites: formula las preguntas, añade de su cosecha un poco aquí y otro poco allá [...] O el investigador deja de aguantar e impone su punto de vista o es muy probable que, por muy buena fe que tenga el periodista, el sondeo se eche a perder.»
A eterna disputa entre scholars e profesionais da información, do espectáculo, da desinformación regular, e do entretemento, verbo da calidade dos media de comunicación, só se deterá no momento no que as empresas xornalísticas non dependan da publicidade e dos índices de audiencia para subsistir e os académicos abandonen as súas cátedras para facer coberturas de cicloxéneses explosivas enchoupados ata os xeonllos.
245

No hay comentarios:

Publicar un comentario



Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...